Punto de situación del transporte marítimo post pandemia
Situación del transporte marítimo post pandemia
La irrupción de la pandemia del COVID-19 a principios del año pasado ha significado para la mayoría de industrias un desafío al que se han tenido que ir adaptando para paliar las consecuencias inmediatas de aquellos primeros meses. El sector del transporte marítimo tampoco ha sido ajeno a dicha irrupción, es más, ha jugado un papel importantísimo en la transición del mundo pre-pandémico al post-pandémico. Principalmente, en lo que tiene que ver con el mercado de fletes, el cual ha experimentado fuertes subidas durante los últimos 12 meses.
Entrevistamos a Jaime Paz Burgos, Head of Customer Service Spain en Ocean Network Express (Spain), sobre el aumento de los fletes a raíz de la pandemia, cuál es la previsión en la desescalada de precios y qué medidas ayudarán a revertir la situación.
¿Cómo afectó la pandemia en las operaciones portuarias?
Las fuertes medidas de confinamiento tras el contagio del virus a nivel global trajeron como principal consecuencia la congestión en los principales puertos del mundo, fruto de la caída en la eficiencia de las operaciones portuarias. Esto obligó a las navieras a ajustar los itinerarios y las rutas de sus servicios regulares, en forma de reducción de escalas, lo que hizo disminuir drásticamente la oferta de espacio.
La demanda, sin embargo, no disminuyó en el mismo orden y pasó lo que pasa en todos los mercados: un aumento de los precios, que ha continuado hasta hoy. De manera que se pasó de niveles de 1500 USD por un contenedor de 40 pies desde Asia a Europa, a 12000 USD en la actualidad: parece una exageración, pero se trata de un 500%, en aproximadamente un año.
¿Cuál es el mayor desafío al que se enfrenta la industria hoy en día?
La demanda de comercio electrónico ha aumentado un 12% entre enero y agosto de 2021 en comparación con 2020, sin embargo, muchos factores causales están en juego detrás de los crecientes niveles de congestión fuera de los principales puertos.
Cuando empezó la escalada en los precios de los fletes, todos pensábamos que la situación duraría unos meses. Sin embargo, los expertos sitúan a principios de 2023 como el momento para empezar a aliviar los cuellos de botella en las terminales, el mayor desafío al que se enfrenta la industria hoy en día: el 40% de los barcos en los puertos de la costa oeste de los Estados Unidos esperan para descargar y cargar. El tiempo medio de espera en Europa también ha aumentado un 20%, y en China un 12%.
Esto produce aglomeraciones, colapsos en las aduanas, y sobre todo, una falta de disponibilidad de contenedores vacíos como nunca antes se había experimentado. Esto causa que los costes de las navieras hayan aumentado exponencialmente, sin tener en cuenta la tendencia alcista de los precios de los combustibles.
Como estamos en medio de la tormenta, la recomendación de las navieras y forwarders es adelantar los pedidos lo máximo posible no para 2021, sino ya para más allá del Año Nuevo Chino 2022 y en adelante.
¿Qué medidas han tomado las navieras ante esta situación?
Por un lado tenemos el elevado coste del transporte con su elevadísima repercusión en el precio final de los productos, y por otro, el tiempo que se necesita para poder hacer una reserva de espacio en un barco y traer dicho producto a Europa.
Sin embargo, las navieras, que han sido objeto de críticas crecientes debido al aumento de los costes de flete, han aumentado la capacidad en las líneas, y los viajes desde Asia a América del Norte, por ejemplo, han aumentado la capacidad en un 30,6% desde el 1 de julio de 2020 hasta el 1 de julio de 2021. Además, todas ellas ya han encargado la construcción de nuevos buques para aumentar la capacidad, y por tanto, la oferta.
¿Hasta cuándo se prevé que dure esta situación?
Si bien las navieras están teniendo el papel del malo en esta película, como hemos podido ver, no todos los factores que intervienen están bajo su control: congestión en los puertos, falta de eficiencia, precio del petróleo, falta de reacción por parte de las aduanas en el nuevo escenario y volviendo al principio, un virus que se ha extendido a nivel planetario y que ha matado ya a más de 4 millones de personas.
Es complicado, por tanto, hacer una previsión sobre la evolución del mercado de fletes, que es, al fin y al cabo, lo que trae de cabeza a la industria mundial, ya que las tensiones de logística de contenedores y las dificultades en la gestión de espacio en los barcos va a continuar, al menos, hasta el Nuevo Año Chino de 2022 (1 Febrero). Para saber lo vaya a pasar a partir de ese momento, tendremos que esperar unos 5 meses.